Programa dolor crónico 

El dolor se define por parte de la Asociación Internacional para el estudio del dolor (IASP por sus siglas en inglés) como una “experiencia sensorial y emocional desagradable, asociada o similar a la asociada con un daño tisular real o potencial” (Raja SN, Carr DB,Cohen M, Finnerup NB, et al. 2020). 

El dolor crónico es una patología que sufre un 17% de la población española, siendo una de las 10 patologías más prevalentes, afectando de forma mayoritaria a las mujeres (ver link).

Este alto nivel de sufrimiento nos lleva a plantearnos la necesidad de ofrecer un programa de asistencia, que integre todos los aspectos relacionados con este grave problema de salud.

Porque tener dolor crónico significa dificultades individuales en el afrontamiento de las actividades de la vida diaria (dificultad en el desempeño de los roles cotidianos, baja autoestima, impotencia, trastornos del sueño), unido a un impacto negativo a nivel familiar, social y laboral. Todo esto acaba afectando no solamente a nivel físico, sino de forma profunda en la salud mental de las personas que lo padecen.

Siendo el dolor una experiencia sensorial, significa que el organismo al completo está involucrado, generando una respuesta neurofisiológica que regula directamente nuestras emociones y nuestras respuestas comportamentales, por lo tanto, su abordaje debe ser de forma holística.

El objetivo de este programa es favorecer la conexión entre cuerpo y mente para mejorar la gestión del dolor, generando herramientas saludables de regulación emocional y control corporal.

Cada caso se evalúa de forma individualizada según las necesidades de la persona, adaptados específicamente a la realidad de cada individuo que demanda nuestra ayuda, sin olvidar una estrecha y continuada coordinación con todos los profesionales que intervienen en el caso.